No ha sido nada fácil… ¡pero lo hemos logrado!
Debido al carácter sagrado del islote de Poilão, fue necesaria la celebración de una reunión con los propietarios tradicionales de la isla, los habitantes de la aldea de Ambeno, en la isla de Canhabaque.
Los hommes grandes, los más mayores y sabios de la aldea, nos dijeron que había que preguntar a los iranes. Hicieron falta varias ceremonias, en un bosque sagrado próximo a la aldea, en la baloba de la tabanca…
Se sacrificaron gallinas, se derramó aguardiente de caña de azúcar… y finalmente su respuesta sagrada fue positiva.
Ya en la isla de Poilão, hemos mejorado la superficie del “vivac”, gracias a la colaboración de la Fundación Biodiversidad y del IBAP y de la IUCN.
Se ha diseñado una estructura típica Bijago, para colaborar un poco más, en la preservación del patrimonio cultural de los Bijagos. Se ha utilizado la madera local, Rizophora racemosa, llamado localmente Tarafe, ya que era como, originalmente, se realizaba esta estructura.
Esta construcción ancestral ha sido realizada por los carpinteros de Canhabaque, propietarios tradicionales de la isla, y se denomina Bentem Camabi. Esta denominación tiene su explicación en que antiguamente la construcción la hacían los jóvenes “camabi” bajo la supervisión del carpintero jefe, como parte de su formación para llegar a la fase adulta.
De esta forma, se propugnan los valores de la cultura local y se refuerza el espíritu del ecoturismo, así como se proporciona empleo e ingresos a la población de la isla de Canhabaque. La estructura es un techado con una plataforma elevada, utilizada por los habitantes locales para dormir.
